Sandra Beatríz Martínez murió este domingo de Pascuas, a raíz de un paro cardiorrespiratorio mientras estaba internada en el hospital “Delicia Concepción Masvernat”, a raíz de las lesiones sufridas 4 días antes cuando se había prendido fuego en los Tribunales de Concordia.

La abogada concordiense María de los Ángeles Petit, más conocida como «Cielo», utilizó su cuenta en la red Social Facebook para expresarse al respecto. “Es lamentable y dolorosa la muerte de una mujer luego de intentar un suicidio en los Tribunales de Concordia”, empezó diciendo.

En su texto, abordó cuestiones vinculadas a cómo se presta el servicio de Justicia, “a la mezcla que existe en ese edificio”, definió como también al “desconocimiento general” que prima entre los vecinos que acuden por atención.

“No pueden atender 2 fiscales en una sola oficina de 2 x 2”, indico y amplió que tampoco “pueden estar adultos, adolescentes, esposados cruzándose con familias de trámites especiales de ese fuero”.

Planteó, entonces, que “es necesario invertir en el servicio de justicia” e indicó que “quienes trabajan en las oficinas de atención al público y especializados deben estar mejor preparados”, cosa que aseguró no es sólo responsabilidad de ellos sino que también “es responsabilidad del Estado capacitarlos y sobre todo elegirlos por un sistema transparente y eficaz”.

A continuación, El Entre Ríos reproduce el posteo completo de la excoordinadora de Gabinete de la Municipalidad de Concordia:

Es lamentable y doloroso la muerte de una mujer luego de intentar un suicidio en los Tribunales de Concordia.

Más allá de que tengo conocimiento de su estado sicológico, que no me corresponde detallar, desde mi profesión hay algunas consideraciones que creo importante hacer.

La mesa de Fiscalía es considerada por el vecino como una mesa de entradas de Justicia general.

Su atención constante hace que quien tenga un problema que entienda judicial vaya a preguntar.

El vecino no conoce de fueros, materias y competencias aunque todos parecen saber de derecho, por lo que escuchan o leen o ven en películas, series o noticieros.

Y así concurren a plantear todo lo que les pasa de todas las materias.

Eso se debe al desconocimiento general pero también a la mezcla que existe en ese edificio.

En los pasillos se cruzan delincuentes de todo tipo, algunos condenados, otros denunciados, con mujeres golpeadas, abusadas, violadas y sus agresores, con personas que tienen un proceso de divorcio o de alimentos.

Ayer nomás estaba en la Fiscalía cuando escuchaba a una mujer gritarle a su pareja que le había destrozado la vida.
Y eso es responsabilidad del Estado.

En ningún lugar que se pretenda administrar justicia pueden convivir fiscales penales con fiscales especializados en Género con juzgados de familia con defensores de pobres y menores.

No pueden atender 2 fiscales en una sola oficina de 2 x 2.

No pueden estar adultos, adolescentes, esposados cruzándose con familias de trámites especiales de ese fuero.

El orden, el cambio empieza con la inversión de una buena infraestructura para trabajar y para brindar un mejor servicio.

Quizás no es tan necesario el nombramiento de nuevos fiscales o jueces o personal.

Es necesario invertir en el servicio de justicia.

Comparto que quienes trabajan en las oficinas de atención al público y especializados deben estar mejor preparados.

Pero no solo es responsabilidad de ellos.

Es responsabilidad del Estado capacitarlos y sobre todo elegirlos por un sistema transparente y eficaz.

Fuente: El Entre Ríos.

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