
Este sábado por la mañana, los restos de Luisina Leoncino, la joven concordiense cruelmente asesinada y descuartizada, fueron sepultados en el Cementerio Nuevo de la capital del citrus.
Tras el velatorio llevado a cabo en la sala Los Olivos, un numeroso grupo de personas, entre quienes podían distinguirse a familiares, amistades y también a quienes participaron de los operativos de búsqueda, partió hacia el cementerio en una caminata que se volvió procesión, acompañada por el Presbítero Néstor Toler, párroco de Nuestra Señora del Valle.
El recorrido incluyó el paso frente al templo de Pompeya, que hizo sonar sus campanas. Luego continuó por calles Vélez Sarsfield, Humberto Primo, Las Heras y Villaguay, hasta ingresar al cementerio. En reiteradas ocasiones el nombre de Luisina fue gritado con fuerza, casi como una letanía, mientras se escuchaba de boca del sacerdote una oración que se volvió también reclamo e interpelación.
“Desde el primer momento que nos enteramos estuvimos clamando y por eso la sentimos con el corazón como parte de nuestra comunidad. Luisina es un grito que si no lo escuchamos va a ser tarde para muchos. La droga los sigue silenciando y nosotros no queremos escuchar”, dijo Néstor Toler.
“Concordia -remarcó- tiene que llorar por sus barrios y pedir perdón. Los hemos dejado desamparados. Mientras muchos políticos hacen caminatas por los barrios buscando votos, nosotros caminamos al cementerio con las víctimas de esta mafia organizada, como ya nos decía el Padres Andrés. El martes pasado fue Paulo, hoy Luisina”, recordó, en alusión a un joven concordiense que fue asesinado por el narcotráfico en Rosario.
Néstor Toler se preguntó «en qué piensan los políticos cuando recorren las barriadas más vulnerables» y prosiguió: “Aquí en los barrios estamos al borde de una fosa y no sabemos quién es la próxima víctima. La sangre de tu hermano clama justicia desde el suelo le decía Dios a Cain. La de Jesús en la Cruz clama misericordia y la de Luisina compromiso”.
El párroco de Nuestra Señora del Valle invitó a la gente a rezar asumiendo “compromisos”: “Yo me comprometo por tantas Luisinas que siguen pidiendo auxilio; por tantos niños a los que les hemos robado la familia, la inocencia, la educación, matamos su dignidad; por los jóvenes que los está matando lentamente la droga; ante tantas Madres del dolor, para que las sostengamos en su lucha cotidiana”.
El “yo me comprometo” fue seguido de otra oración: “Jesús en vos confío porque ya abrazaste a Luisina con tu misericordia; porque desde la Cruz donde sigues padeciendo por tu pueblo nos dices ‘Ahí tienes a Tu madre’; porque sigues presente en cada gesto de amor al hermano; para que nos ayudes a sanar esta herida de dignidad que sigue sangrando; para que Concordia despierte y se encienda el compromiso con el hermano”.
“Creo que este es el momento de ponernos de pie y en estas elecciones decidir cuál es el camino y quién está dispuesto o ponerle la vida para sacar adelante nuestro pueblo”, concluyó Toler.
Fuente: El Entre Ríos